Bueno, si has llegado a este post es porque te interesa conocer los efectos que produce el café en el embarazo. Seguramente estés en esa etapa, en la cual te preocupa todo y miras minuciosamente que puedes y que no puedes tomar para evitar perjudicar a esa gran personita que está creciendo dentro de ti.
Antes de nada, ENHORABUENA 🙂 un futuro amante del café está por venir al mundo dentro de ti. Ahora ponte cómoda que te vamos a resolver tus dudas.
¿Cuantas tazas de café puedo tomar durante el embarazo?
Es cierto que durante el embarazo es recomendable sustituir productos con cafeína como el café o el té, por otros que no contengan nada de esta sustancia como la manzanilla, la menta o la tila. Sin embargo, no va a ocurrir nada malo a su bebé por tomar una tacita de café al día estando embarazada, otra cosa sería si abusaras de tomar excesiva cantidad de café.
Un truco para que vuestro cuerpo se adapte a esa reducción de cafeína y no lo note tanto durante el embarazo, es empezar a disminuir la cantidad que tomamos antes de estar embarazada. Si eres una apasionada del café, o simplemente, lo tomas para aguantar los largos días de trabajo, trata de reducir las tazas que tomas, así reducirás la cantidad de cafeína y podrás explicarle a tu cuerpo que no tomarás más de una tacita al día durante el embarazo.
Si aún así prefieres evitar la cafeína, te recomendamos que tras reducir las dosis de café que tomas cada día, mezcles este con café descafeinado. Poco a poco te acostumbrarás a su sabor, para terminar tomando únicamente café descafeinado durante el embarazo. Recuerda que el té y el chocolate, entre otros productos, también contienen cafeína.
La cafeína en la lactancia, ¿es perjudicial?
Al igual que ocurre durante el embarazo, el consumo del café durante el periodo de lactancia del bebé debe ser muy limitado. De hecho, es recomendable sustituir la cafeína por agua, zumos de fruta, y leche. El problema radica en que es posible que si tomamos cafeína esta pueda pasar a nuestro bebé cuando está amamantando.
De nuevo, te animamos a que no lo tomes como una obsesión. Una tacita de café no va a hacer daño a tu bebé, pero si que su consumo excesivo puede traer consigo complicaciones, entre las que se encuentran insomnio, nerviosismo e irritabilidad en el bebé. Por ello, te animamos a que reduzcas a una tacita de café al día, o lo sustituyas por otros productos sin cafeína.
Puedes aprender más cositas interesantes sobre el café en los siguientes posts 😉
